Históricamente, la energía y la industria eran los sectores que sostenían e impulsaban la economía de Rusia. Hasta hace bien poco, las nuevas tecnologías han tenido un peso pequeño, pero el país no ha sido ajeno al boom tecnológico mundial de las últimas tres décadas, que ha redundado en un creciente desarrollo de la industria tecnológica rusa.
A día de hoy, el ecosistema tecnológico ruso tiene tres grandes referentes. Uno es la firma de ciberseguridad Kaspersky Labs, con sede en Moscú y presencia en casi 200 países. Otro es Yandex, que ofrece -fundamentalmente en Rusia, Bielorrusia y Ucrania- diversos servicios de Internet: buscador, almacenamiento en la nube, correo electrónico o pagos móviles. Y el tercero es Telegram, la plataforma de mensajería instantánea que ha triunfado como una alternativa más segura y versátil a WhatsApp.
Son estas tres empresas el espejo en el cual se miran muchas nuevas empresas rusas, pero no las únicas. Los tres sectores donde han surgido más startups rusas en los últimos tiempos son las tecnologías de la información (incluyendo Internet y móvil), la biotecnología y medicina, y materiales y equipamiento de alta tecnología.
Pese a que la mayor parte de las startups rusas no son muy conocidas fuera del país, las más veteranas ya se han expandido internacionalmente por Europa, Asia y Estados Unidos. Es el caso de la empresa BeSmart.net -especializada en educación- y de la inmobiliaria Hipflat, que han seguido el camino de la red social VK y el servicio de pagos electrónicos RBK Money.
Otras startups tecnológicas consolidadas son la plataforma de venta de entradas para eventos Ticketland, el agregador de servicios de entrega de alimentos Delivery Club y la guía de viajes online Travel.ru.
Poniendo la lupa sobre las nuevas empresas rusas que están empezando a despegar, se encuentra Coub, una plataforma de vídeos virales que ya está ganando terreno a Vine en Europa, Japón y Estados Unidos, y a LiveMap, que ha desarrollado un casco de moto inteligente. El último ranking de las 50 startups rusas más interesantes Russian Startup Rating -elaborado por Russia Beyond The Headlines-, destaca Ecwid, una startup de los Urales que se ha convertido en líder mundial en soluciones de comercio social; le sigue Dauria Aerospace, que el año pasado recibió una inversión de 70 millones de dólares de un fondo chino, y Magnetic, creadora de una innovadora nota adhesiva.
Otros ejemplos de startups que han obtenido reconocimiento internacional son N-Tech.Lab, creadora de un algoritmo de reconocimiento de rostros; Astro Digital, una plataforma para acceder a datos satelitales, y 3D Bioprinting Solutions.
El ecosistema de startups ruso se complementa con fondos de capital riesgo privados, como Almaz Capital, AddVenture o Runa Capital, junto a las iniciativas estatales Fundación Skólkovo, Russian Venture Company (RVC) y Russian Corporation of Nanotechnologies (Rusnano). Aun así, la inversión en startups todavía no alcanza el nivel de Alemania o Reino Unido.
Para Jean François Balducchi, expresidente de la Asociación Internacional de Parques Científicos y Áreas de Innovación (IASP), el principal desafío de Rusia es la creación de un entorno que fomente el desarrollo de startups. Desde el Instituto Skolkovo de Ciencia y Tecnología, por su parte, sostienen que “para fortalecer este desarrollo, se tiene que educar y facilitar la vida a los emprendedores, proporcionar mejores contactos entre la industria y la ciencia, y desarrollar fuentes de capital riesgo que tengan un horizonte de retorno más largo”.
J. Miguel Revilla
Colaborador
Categorías:Rusia